Es lo último en moda canina. Mejor que la manicure, las peluquerías o las piscinas para perros. Porque si tu perrito respira muy rápido, está agitado o es difícil de controlar, esta técnica ancestral hindú puede ser la gran solución.
No cabe duda. Para mucha gente, poseer uno o más perritos se ha vuelto casi tan importante como tener un hijo. Y así afrontan su 'estilo de vida'. Prácticamente los sacan del grupo canino y no escatiman tiempo, dinero o esfuerzo para lograr que sus mascotas sean felices.
Tanto es así que, más allá del dinero que se pueda gastar en ellos, servicios que antes estaban reservados únicamente a las personas, ahora se están dirigiendo a las mascotas, como, por ejemplo, ¡el Yoga!.
Ese es el último grito de la moda canina. Claro, bastante sofisticado y espiritual; nada comparado con los salones de belleza y peluquerías, la manicure o las piscinas para canes.
Practicando 'doga'
Ahora los perritos reciben clases de yoga... ¿Para qué?... para terminar con el estrés, por supuesto. Después de unos 30 minutos, hasta el más rebelde de los participantes es capaz de relajarse, y se convierte en un ser muchísimo más calmado.
La cosa es así. Tú asistes con tu adorada mascota a clases de yoga, y luego de una corta lectura de inspiración sobre perros y un momento de emisión de 'OMs', comienza la clase.
'Doga: Yoga para Perros' ('Yoga for dogs')
Así se llama el libro editado por Chronicle Books, y cuyos autores son Jennifer Brilliant, que enseña yoga en el 'New York's famed Om Yoga', y William Berloni, un 'consultor de animales'.
Se basa en que algunas de las mejores posiciones conocidas del yoga surgen de movimientos de perros, y trae consejos para que el dueño practique yoga con su perro. En este libro salen muy bien explicadas - a través de textos y fotografías - las diferentes posiciones, y el manejo y técnicas de la respiración.
El libro se basa en que los perros han practicado desde siempre lo que hoy llamamos 'doga'. Por lo mismo, se explica su tranquilidad mental, y su habilidad para estar en los momentos precisos.
Los protagonistas son Benny, Buster y Cricket, quienes han estado practicando por años los principios del doga. Ahora, en este libro, revelan sus poderosos secretos.
Si quieres conocer más detalles de este libro y/o comprarlo, entra aquí
Siguiendo a un instructor, debes lograr que tu perrito realice las posturas tradicionales del Yoga, comenzando por formar con su peludo cuerpecito la 'V' invertida de la pose del 'perro'... ¡Y es que así se llama una de las posturas del Yoga!.
Luego, los dueños se flexionan sobre los perros y toman a sus mejores amigos en una 'postura del niño', que fue renombrada como 'postura cachorro'.
Se estiran a la izquierda y a la derecha, y se levantan en los brazos. Y no puede faltar el beso de amor.
Notarás así, cómo su respiración se sincroniza con la tuya y la de los instructores.
Y no dudes en que resultará, ya que a la mayoría de los perros les gusta estirarse, y disfrutan muchísimo ser masajeados por sus amos.
La idea de dar clases de Yoga a los perros es de la instructora estadounidense Suzi Teitelman, quien descubrió que a su perrito spaniel le gustaba seguirla en las rutinas que hacía en su casa, subiéndose a la colchoneta...
El Yoga para perros, que hoy se conoce como 'doga', y que se pronuncia 'DOH-gah' (derivado de la palabra en inglés 'dog', que significa perro), ha tenido buenísima acogida más allá de Nueva York.
Y lo más seguro es que muy pronto lo tengamos en Chile, ya que los amantes del Yoga en nuestro país aumentan día a día.
Ya lo sabes, si tu perrito respira muy rápido, está agitado o es difícil de controlar, ¡el yoga puede ser la solución!."
No cabe duda. Para mucha gente, poseer uno o más perritos se ha vuelto casi tan importante como tener un hijo. Y así afrontan su 'estilo de vida'. Prácticamente los sacan del grupo canino y no escatiman tiempo, dinero o esfuerzo para lograr que sus mascotas sean felices.
Tanto es así que, más allá del dinero que se pueda gastar en ellos, servicios que antes estaban reservados únicamente a las personas, ahora se están dirigiendo a las mascotas, como, por ejemplo, ¡el Yoga!.
Ese es el último grito de la moda canina. Claro, bastante sofisticado y espiritual; nada comparado con los salones de belleza y peluquerías, la manicure o las piscinas para canes.
Practicando 'doga'
Ahora los perritos reciben clases de yoga... ¿Para qué?... para terminar con el estrés, por supuesto. Después de unos 30 minutos, hasta el más rebelde de los participantes es capaz de relajarse, y se convierte en un ser muchísimo más calmado.
La cosa es así. Tú asistes con tu adorada mascota a clases de yoga, y luego de una corta lectura de inspiración sobre perros y un momento de emisión de 'OMs', comienza la clase.
'Doga: Yoga para Perros' ('Yoga for dogs')
Así se llama el libro editado por Chronicle Books, y cuyos autores son Jennifer Brilliant, que enseña yoga en el 'New York's famed Om Yoga', y William Berloni, un 'consultor de animales'.
Se basa en que algunas de las mejores posiciones conocidas del yoga surgen de movimientos de perros, y trae consejos para que el dueño practique yoga con su perro. En este libro salen muy bien explicadas - a través de textos y fotografías - las diferentes posiciones, y el manejo y técnicas de la respiración.
El libro se basa en que los perros han practicado desde siempre lo que hoy llamamos 'doga'. Por lo mismo, se explica su tranquilidad mental, y su habilidad para estar en los momentos precisos.
Los protagonistas son Benny, Buster y Cricket, quienes han estado practicando por años los principios del doga. Ahora, en este libro, revelan sus poderosos secretos.
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Siguiendo a un instructor, debes lograr que tu perrito realice las posturas tradicionales del Yoga, comenzando por formar con su peludo cuerpecito la 'V' invertida de la pose del 'perro'... ¡Y es que así se llama una de las posturas del Yoga!.
Luego, los dueños se flexionan sobre los perros y toman a sus mejores amigos en una 'postura del niño', que fue renombrada como 'postura cachorro'.
Se estiran a la izquierda y a la derecha, y se levantan en los brazos. Y no puede faltar el beso de amor.
Notarás así, cómo su respiración se sincroniza con la tuya y la de los instructores.
Y no dudes en que resultará, ya que a la mayoría de los perros les gusta estirarse, y disfrutan muchísimo ser masajeados por sus amos.
La idea de dar clases de Yoga a los perros es de la instructora estadounidense Suzi Teitelman, quien descubrió que a su perrito spaniel le gustaba seguirla en las rutinas que hacía en su casa, subiéndose a la colchoneta...
El Yoga para perros, que hoy se conoce como 'doga', y que se pronuncia 'DOH-gah' (derivado de la palabra en inglés 'dog', que significa perro), ha tenido buenísima acogida más allá de Nueva York.
Y lo más seguro es que muy pronto lo tengamos en Chile, ya que los amantes del Yoga en nuestro país aumentan día a día.
Ya lo sabes, si tu perrito respira muy rápido, está agitado o es difícil de controlar, ¡el yoga puede ser la solución!."
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