domingo, mayo 06, 2012

¡A tragar semen señoritas!

Para prevenir un carcinoma. La mujeres que a menudo ingieren el semen de sus parejas tienen un 40% menos de probabilidades de desarrollar un cáncer. Así lo afirman los investigadores de la Universidad Estatal de Carolina del Norte, Estados Unidos.

"Yo animo a todas las mujeres del mundo a que practiquen la felación y que ésta, se convierta en la rutina más importante de su vida diaria" afirma la doctora Helena Shifteer, directora del grupo de científicos que realizaron el estudio sobre los efectos del semen.

La doctora Shifteer dice también que ella siempre se traga el semen de su marido y, para que el método sea efectivo, debe practicarse al menos dos veces por semana.

El semen contiene muchos elementos para estimular el esperma: como las vitaminas C y B12, minerales como el calcio, magnesio, fósforo, potasio y zinc. Además es rico en proteínas, sodio, colesterol y azúcares.

Estas propiedades que a la vista parecen ser de cualquier alimento como el yogurt o una manzana, las entrega precisamente la ingesta de esperma que derrama tu pareja cada vez que tienen sexo.

Desde la antigüedad, en los tiempos de Cleopatra, se conocían los beneficios de este “compuesto” como método para rejuvenecer y embellecer la piel.

Leyendas provenientes de los registros que se encontraron en papiros de la época cuentan que la bella reina egipcia tenía a su disposición un esclavo que le proveía de este líquido para aplicarse todas las noches la sustancia en el rostro. Ese era su secreto para preservar su belleza y juventud.

En otras culturas, no servía precisamente como método de belleza. En Japón, el término bukkake, implicaba un castigo para las mujeres infieles, donde el semen era el actor principal. Eran roceadas con esperma por varios hombres a modo de sanción por su deslealtad.

http://www.cronica.com.ar/diario/2012/05/04/25258-te-lo-vas-a-tener-que-tragar....html

Sobrevivieron 3 perros a la tragedia del Titanic

En el desgraciado suceso del hundimiento del Titanic, ocurrido en el año 1912 en aguas del océano Atlántico, tres pudieron sobrevivir a la catástrofe. 

 

 

Según los historiadores con las 1.514 personas viajaban doce perros de los que sólo tres pudieron salvar sus vidas cuando se hundió el barco. 

Con motivo del centenario de esta tragedia, la Widener University Art Gallery de Pensilvania ha presentado una exposición fotográfica dedicada exclusivamente a los perros que lograron sobrevivir. 

De los perros que sobrevivieron, según explica J. José Edgette, dos eran de raza pomerania y el otro un pekinés llamado Yat-sen. 

” Llevar mascotas a bordo sólo era de los pasajeros de primera clase, quienes en algunos casos, se daban el lujo de obtener pólizas de seguro para sus animales”. “La tripulación fue muy respetuosa y a los pasajeros de primera clase se les dio lo que querían para mantenerlos contentos”, explicaba Edgette. 

La cara triste es la de Ann Elizabeth Isham, de 50 años, que viajaba con su gran danés. Durante el hundimiento, la mujer pudo escapar en un bote con su perro, pero no lograron sobrevivir. Pasados unos días del naufragio, encontraron el cuerpo de la pasajera aferrado al de su perro, ambos sin vida.

Tema de Stars Wars cantado por un solo tipo.