Jerarcas: ira y arrogancia

En Privado

Joaquín López-Dóriga

Las crisis desafían a la razón

y a la inteligencia. Florestán

Arrebatado, el cardenal Juan Sandoval Íñiguez, arzobispo de Guadalajara, reviró a los reporteros con ese su tono violento:

—¡Qué! ¿A ustedes les gustaría que los adopte una pareja de maricones o de lesbianas?

Iracundo, retrataba que casi todos, no todos, somos hijos de Dios y que en su mundo no caben maricones ni lesbianas, sustantivos que utiliza como descalificativos.

Sandoval Íñiguez lleva largo tiempo alterado ante la legalización de los matrimonios entre personas del mismo sexo y su derecho de adopción, lo que para él, como para los demás jerarcas de la Iglesia católica, es una aberración.

Entiendo el rechazo de los mitrados de la Iglesia, curas y de una enorme mayoría de fieles a los matrimonios y a las adopciones, y tienen sus argumentos de peso. Pero la respuesta jerárquica debía haber sido inteligente, caritativa y congruente con el amor que predicó Cristo.

Sandoval se mantuvo en línea con el rechazo de la Arquidiócesis primada, cuyo titular, Norberto Rivera, fijó su oposición mediante una carta leída por un matrimonio en catedral, en la que coincidió con el calificativo deaberrante, y otros descalificativos, los suyos, los de Valdemar y los de sus abogados.

Convencido de que la Iglesia es él, Sandoval volvió a retratar su intransigencia y limitaciones al acusar de corruptos a los ministros de la Corte y de corruptor al jefe de Gobierno del Distrito Federal, como si el fuero religioso que ejerce en su arquidiócesis fuera universal.

Ahora vendrá la contrarreacción. Marcelo Ebrard le dio hasta hoy para proceder en su contra, y la condena del pleno de la Corte adelanta un proceso legal si este príncipe de la Iglesia no se retracta o documenta su grave acusación.

Aunque igual ni prueba, ni se retracta, ni lo demandan.

Retales

1. HUMO AZUL. La comisión de orden panista conocerá hoy los casos Manuel Espino y Armando Reynoso. En dos meses estarán fuera del PAN, cuando se han conocido las relaciones peligrosas del sobrino de Espino, muerto a tiros en Juárez, y su precandidatura presidencial, la misma que había negado y con la que ahora busca vacunarse;

2. CAMBIOS. Alejandro Werner deja la subsecretaría de Hacienda para irse a la IP, igual que Pedro Aspe y Francisco Gil. El presidente Calderón nombró a José Antonio Meade nuevo subsecretario del ramo y a José Antonio González Anaya subsecretario de Ingresos, que tenía Meade. El coordinador de Entidades Federativas será Carlos Garza. El caso pasa por la Permanente; y

3. NI ESO. ¿Quién y quiénes son responsables de que tras meses de cierres y cientos de millones de pesos enterrados, ahora se anuncie que el Arco del Bicentenario estará hasta finales de 2011? O qué, ¿también se lo endosarán al presidente Calderón?

Nos vemos mañana, pero en privado.

lopezdoriga@milenio.com

Monólogos de los cavernicolitas con sotana

Política cero
Jairo Calixto Albarrán

Así, ya, en buen plan, los mexicanos y las instituciones deberíamos de cooperarnos y juntar una generosa limosna para reconocer a la alta jerarquía católica, que desde el púlpito, o por interpósita persona, siempre anima la existencia del público conocedor con sus avanzadas declaraciones, prodigiosas sentencias medievales y manifestaciones de pluralidad, inclusión y tolerancia.

Nada más alentador que ver a los celadores de la palabra divina, generar grandiosos espectáculos en el circo romano de sus convicciones, donde se arrojan a los infieles a los leones hambrientos y al fragor de la batalla con los gladiadores del Yunque. Es como nunca haber pasado por el Siglo de las luces y habernos saltado la Ilustración, la Movida madrileña, los hoyos fonquis y la nacionalización petrolera. Es como si don Plutarco hubiera perdido la guerra Cristera y el padrote Maciel fuera el secretario de Educación. Es como si saliera Jelipillo a reconocer que el unicornio azul del laicismo ayer se le perdió.

Y cómo no los vamos a querer a los del Episcopado y a los ensotanados de la catedral, a Sandoval y aNorbeto, al rebaño sagrado de Provida, a los abogados católicos con derecho a quemar en leña verde y a todos los que quieren y aman las cacerías de brujas, porque nomás de imaginar el berrinche entripado que hicieron al enterarse de que la Tremenda Corte le dio constitucionalidad a las adopciones para las parejas del mismo sexo, le proporcionaron alegría y entretenimiento a toda la familia.

Mejor show que el de Pau Rubio vs. Ale Guzmán, por ejemplo, están las luchas en lodo entre el vocero de la Arquidiócesis, Hugo Valdemar (el mismo que afirmó que peor que la narcoviolencia son los matrimonios gays)vs. Marchelo Ebrard, quien retó al cavernario cardenal Sandoval Íñiguez a que ofreciera disculpas por acusar a la Tremenda Corte de corrupta, a riesgo de ser demandado.

Y en respuesta, Valdemar, que es un dechado de prudencia y reflexión, prácticamente acusó a Marchelo de todos los males de la patria, y casi casi le echó la culpa de los triunfos de la selección gay de futbol y del fusilamiento de Maximiliano en el Cerro de las Campanas.

Estos son dos tipos de cuidado. Y esta vez es personal.

Ahora, dada la incomprensión a la que han sido sometidos los cavernicolitas de la sotana, quizá sea tiempo de que se den una paseada por los orfanatos y las calles donde pululan los niños sin amor, condenados al oprobio, para que les expliquen que con la posibilidad de ser adoptados por matrimonios entre personas del mismo sexo, la Corte sólo quiere ponerles en la madre

¿Tiene la Iglesia Católica autoridad moral para criticar?

Miembros de la Iglesia Católica (si, esos que acostumbran a mandar mensajes de odio y homofobia en los medios todos los días. Los mismos a los que les llevas a tus hijos para que se los cojan. Esos que han vivido del asesinato y la ignorancia de millones de personas durante siglos. Esos que OBEDECEN A UN GOBIERNO EXTRANJERO…) están haciendo un llamado a desobedecer las leyes de México así que deben ser castigados por ello.

¿Dónde estarán los valientes que lo van a hacer? No cabe duda, hacen falta hombres como Plutarco Elías Calles en el gobierno…